Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2014

Lo que faltaba...

Despertó con la sensación de que algo no estaba bien. Sin moverse de la cama agudizó el oído tratando de advertir algo diferente en el ambiente. Nada parecía fuera de lugar. Pero todo se sentía serenamente anormal, contrario a la angustia que su sexto sentido alertaba. ¿Qué era lo que faltaba? Palpó su cuerpo hasta llegar a su pecho. Ahogó un grito sordo y los músculos se le tensaron. Una sensación de absoluta derrota la invadió. Se habían llevado su corazón... y esta vez sospechaba que para siempre.

Tu mundo, son mis ganas.

Parte del cielo que te ilumina y te calienta, son mis ganas de amanecerte. De hacerte mío. De llenarte a mares. De conocer tus olas y respirar tú aliento. Parte de la brisa que rocía tu cara por las mañanas, son mis deseos de besarte tierno. Eterno. Apasionado. De conquistarte el alma a besos. Llenarte el corazón de caricias y el cuerpo de sabores nuevos. De probar tus sinsabores y azucararlos lento. Tomarte de la mano y caminarnos por dentro. Hacernos un camino y deshacerlo luego.

Con D

Desdeño los silencios que no están acompañados de labios rozándose, de miradas de complicidad, de manos haciendo poemas en la piel. Desprecio las palabras por compromiso, las bocas que no se silencian, que no se detienen para dar un beso. Detesto la falta de quietud, el agobio sin motivo, la incapacidad de disfrutar los latidos, acompasados, serenos. Disgusto del ciego con la vista perfecta que no ve, que no admira, que no disfruta. Desconfío de quien vive en torbellinos inventados de malestares encontrados o por encontrar. Disfrutar es mi placer. Descubrir mi delirio. Deleitar y deleitarme mi razón. Deleitarte mi perdición y mi buen juicio.